Mi padre es aquella persona que se compró una moto y la devolvió a las 2 horas porque vio un accidente en el periódico.
También es aquel que ha protagonizado una de las mayores bajadas de pantalones de la historia de mi familia con el consecuente vacile.
Mi madre (esa que me mima), fue la líder de un grupo de conspiradores entre los que encontramos a Marta Orío, Richar Gálvez y Borja Gallego, que el día 28 taladraron la cabeza a este pobre hombre...a la tercera botella de vino ”dónde tengo que firmar”
Coñas de mi padre tuve que aguantar durante todas las Navidades “una vespa no, tres!!! una de cada color para que vayas conjuntada…”
Pero llegó el 31 y cual familia Telerín, los 26 que allí nos congregamos estábamos finalizando el amigo invisible (una hora cantando qué seráaaa, seráaaa). De pronto, finiquitado el cotarro, se acerca mi hermano con un paquete...
“papá como sea una vespa de juguete, eres muy gracioso…”
Cara de imbécil al ver el casco, llantos, risas y los todos como energúmenos nos dirigimos al portal cantando oé oé oé oéee!! Las puertas con vecinos que no daban crédito se abrían a medida que bajábamos pero yo no veía nada porque todo daba igual. Ahí estaba.
Foto de la nena con el casco puesto y los papás a los lados, carcajada general y yo que no me lo creo todavía.
Empiezo el 2007 motorizada!!!
Sí señor, tengo una Vespa roja.